Se va uno de los más crudos inviernos que recordamos, y llega la primavera, una muy particular, que se mueve entre la dureza y la austeridad.
El clima de la época determina las tendencias, y esta temporada no va a ser la excepción. Todo lo que se diseñe dentro de ella estará inspirado por colores que se moverán entre la moderación y el optimismo, una medida esperanza.
El color elegido para esta temporada será el azul perlado. Su discreta suntuosidad y su medido brillo son lo que una época de contención demanda.
Su uso en las telas aplica notas de alegría sin resultar abrumador y banal. En pequeñas dosis, resalta sin estridencias que rompan la armonía. Es ideal para cojines con toques étnicos, y recibe de muy buen grado apliques metálicos.
Pero el lugar natural del azul perlado es la cerámica, en donde hace protagonista a cualquier pieza que lo ostente, aportando profundidad cuando es el color base, y un destello especial cuando se utiliza para realzar detalles o estampados.
Si buscas un color sereno pero llamativo, y quieres entonar con el espíritu de la época, y las nuevas tendencias, apuesta por el azul perlado en telas y detalles, y disfrutarás de una resplandeciente armonía en tus ambientes, sin alegrías banales.